Aunque de vez
en cuando se publican reportajes sobre la elegancia de la doctora Camille Saroyan, aunque existen páginas web (aquí) que explican de quién son y cuánto cuestan los
vestidos que han exhibido en las últimas temporadas las mujeres de Bones, no he encontrado ninguno que
mencione o muestre los outfits (hablemos en jerga fashionista) anteriores a la octava temporada, ni que cuenten cómo han evolucionado a lo largo de los diez años
que lleva la serie en antena.
Es cierto que
las mujeres de Bones no son las
chicas de Sexo en Nueva York,
ni la doctora Brennan es Carrie Bradshaw, ni Cam es Miranda, ni Angela es Samatha ni por supuesto Christine es Charlotte. Las de Bones no son nada fashionistas; mujeres
trabajadoras, al fin y al cabo, se procuran la comodidad antes que el
lucimiento, “De la moda lo que acomoda”, dice el refrán. Claro que también
lo eran, working girls, las
neoyorquinas y con sus outfits de alta costura se
disfrutaba tanto o más que con sus aventuras amorosas.
Ya sé, ya sé
que todas las comparaciones son odiosas, pero me voy a permitir una: los “Manolo Blahnik ” que Carrie llevó a su boda con mister Big y las super cómodas botas negras que la doctora Brennan no se ha quitado en la décima temporada ni para dormir. Podríamos decir que ambas son adictas,
una a sus “manolos”, la otra a sus
botas.
En fin, es
verano, no hay noticias, Booth sigue desaparecido, de Brennan no sabemos nada, estoy de
vacaciones y tengo a mi disposición los DVDS de las nueve primeras temporadas,
así que os propongo echarles un vistazo a los
trajes, a los outfits, a los looks, como queráis llamarles, de las chicas de
Bones.
EL DEPARTAMENTO DE VESTUARIO DE BONES
Ser la
encargada del departamento de vestuario de una serie o de una película,
disponer de presupuesto para ir de compras todas las semanas tiene que ser un
sueño, estresante, claro. Artísticamente son los responsables del “estilo” de la serie para lo que no
sólo hay que tener en cuenta la moda imperante en la calle, sino a los actores y actrices que visten e incluso la
historia que se cuenta.
En Bones durante los últimos diez años Emily Deschanel, Michaela Conlin y Tamara
Taylor han lucido más de dos mil trajes distintos y centenares de
complementos; su estilo, el estilo de sus personajes podríamos definirlo como científico-aventurera, Brennan; hippy-roquera,
Angela y urbanita-casual y muy chic, Cam.
Con tres
cambios de media por episodio para marcar el paso del tiempo, dispondríamos de
una excelente pasarela, si la
mayoría de los trajes no pasase desapercibidos en el juego del plano y
contraplano de la realización. Una lástima para este post.
Desde el
estreno de la serie Bones el
departamento de vestuario ha tenido tres grandes responsables:
— Bobbie Read (2005-2008) 61 episodios de la Primera a la
Cuarta temporada. Desde el Piloto
hasta The He in the She (4.07).
— Cyntia Ann Summers (2009-2012) 65
episodios desde la Quinta al principio de la Octava temporada, desde Harbingers in a
Fountain (5.1) hasta The But in the
Joke (8.08).
— Robin Lewis West (Desde 2013- a la actualidad) 52 episodios desde el tercio final de la Octava hasta el
final de la Décima , desde The Doom
in the Gloom (8.19) hasta The Next
in the Last (10.22).
OUTFITS: PRIMERA A CUARTA TEMPORADA
Dice Anna Wintour, la directora de la
edición norteamericana de la revista Vogue
“Crea tu propio estilo… deja que sea único para ti y al mismo tiempo
identificable para los demás”.
La responsable del estilo de las chicas Bones fue Bobbie Read, la responsable del departamento de vestuario de la
serie cuando se estrenó. Por entonces, en 2005, todos éramos jóvenes y por
supuesto lo eran Brennan y Angela.
Bobbie Read, siguiendo las instrucciones de Hart Hanson, las vistió como
dos veinteañeras una ecociéntifica y
otra libertaria roquera. A Brennan le
dio un toque especial, algo propio e identificable con ella, sus grandes callares étnicos. Cuando, un
año más tarde se les unió Camille
Saroyan una treinteañera neoyorquina, ex poli y mujer hecha así misma con
mucho esfuerzo, debió acordarse de Dior
“El negro es el color que más adelgaza.
Es el más halagador”. Y de negro
nos la vistió.
BRENNAN
Brennan es una mujer bellísima y por entonces con un espléndido cuerpo
escondido bajo la bata del laboratorio. Cuando se la quitaba vestía saharianas
de algodón, chaquetas entalladas, pantalones
vaqueros, faldas largas, camisas blancas de cuellos imposibles, grandes
como alas de pájaro y hasta camisetas escotadas. Un estilo casual otras muy chic.
Como en
Washington hace frío, en las dos primeras temporadas llevó abrigos largos casi
todos entallados, luego debieron decidir que no era para tanto y pasaron, se recorría las calles con una mera
chaqueta de pana, un gorro y una bufanda; aunque en The Hero in the Hold lució una impresionante gabardina entallada. Lo
cierto es que en ese episodio apareció bellísima.
Cuando lo
requería la ocasión un traje de chaqueta
o un vestido de fiesta algunos preciosos, otros totalmente olvidables y
hasta apareció sexy cuando se disfrazaba. Sus colgantes, sus pendientes largos
marcaron tendencia.
ANGELA
El estilo de Angela estaba acorde con su personaje,
iba de
bohemian rock y vestía ropa
vaquera, chalecos de cuero y cinturones anchos, propio de una chica joven que se ganaba la
vida en los parques haciendo caricaturas, a new hippy sin pretensiones
con camisolas vaporosas, de volantes y lunares. Ah!! Y su bata estaba tuneada
con motivos étnicos.. El traje de su boda no boda, de raso, con el pecho
drapeado, tan años veinte fue un acierto, incluida la capucha, aunque no
sirviese a sus propósitos.
CAMILLE
En cambio de Camille Saroyan en su primer años sólo se puede decir que salvo
cuando llevaba el mono del laboratorio parecía la madre superiora del convento,
casi siempre con ropa oscura, negra o gris, acorde con su puesto de patóloga forense;
con el pelo largo suelto a veces parecía Morticia
Addams.
Luego cambió y
comenzó a lucir su espléndido cuerpo, ese que no pensaba estropear por tener un
millón de hijos.
En la boda no boda de Angela, las tres se lo
debieron pasar de miedo, aunque las damas de honor tuvieran que cambiar de
prisa y corriendo el modelo para estar más sexys.
OUTFITS: QUINTA A SÉPTIMA
TEMPORADA
Cyntia Ann Summers se hizo cargo del vestuario de Bones desde el comienzo de
la Quinta temporada hasta noviembre de
2012, en el comienzo de la Octava.
Y todo o casi todo cambió. Nuestras chicas maduraron y se ensancharon, amaron,
sufrieron y… se quedaron embarazadas. Nada podía seguir igual.
BRENNAN
Con Brennan
pasa una curiosa circunstancia, a partir de la Quinta su look sufre una
transformación, cuando se quita la bata o el mono ya no aparecen camisas
entalladas y pantalones vaqueros, ahora nos encontramos vestidos, y no unos
vestidos cualquiera, sino de talle alto, ceñidos a su pecho o drapeados,
exhibiendo su exuberante escote. Hasta cinco vestidos diferentes de ese mismo
corte llega a lucir en A Night at the Bones Museum (5.05).
Luego, a mitad de
temporada los vestidos ceñidos desaparecen y dejan paso a las camisas de
hombre, a los primeros blazers y sobre todo a las gabardinas. Es como si
después de tanta exuberancia, alguien hubiese dicho basta y Brennan escondiera su cuerpo. Y
lo que parece una tendencia en la Quinta se convierte en norma en la
Sexta, hasta cuatro gabardinas diferentes llega a sacar en el episodio The
Truth in the Myth (6.18) blanca, negra, burdeos y gris. Claro que para
entonces Emily Deschanel ya estaba embarazada.
Y Brennan se
pasó los siete primeros episodios de la Séptima temporada embarazada.
Una embarazada grande, de acuerdo con su estructura ósea. Le engordó todo, al
contrario que a Angela (su embarazo era ficticio), los labios los
brazos, los pechos, que lucía gracias a los blusones premamá ceñidos al pecho.
Inmensa Brennan en la inmensidad de su tripa de la que, al contrario que
en la Décima, continuamente hacía gala al cubrirla, en el hogar, con
algo tan antifashion como camisetas de licra. Luego, después del
parto, que de extrañar era que nada le cupiera.
ANGELA
Angela, por su parte,
sigue con su look de roquera enrollada, un poco más chic que en las temporadas anteriores o un poco más hortera,
dependiendo de las circunstancias. Y además se casa en la cárcel, ahora de verdad, con un vestido negro, estilo
imperio totalmente olvidable. Por
supuesto en la Sexta está embarazada. Una
embarazada muy urbanita y delgada, con
blusones vaporosos, bien fruncidos o con jaretillas. En la Séptima resultó una
madre muy estresada, sus vestidos, más casuales, menos roqueros y con luminosos
estampados.
CAMILLE
El look de Cam es el que sufre una mayor transformación. Abandona el
convento y se convierte casi en una dominatrix, exagero, claro, pero a partir
de la Sexta se viste algunas veces
como si en vez de ir a hacer autopsias fuera a cometer pecado y entonces entre
su cuerpo y la licra no cabe ni un suspiro, minimalista al máximo. Otras como la gran amiga, la gran
persona y la gran jefa que es, con camisitas blanca y su canesú. ¿Personalidad
múltiple? ¿Una mujer en busca de un hombre? O tal vez porque creía como Vivienne Westwood (la diseñadora del
punk inglés) que “Tu
vida es mucho mejor si llevas ropa que provoque admiración”
¿Qué pensáis? Aún
muchos, muchos más vestidos, trajes y gabardinas que reseñar de las chicas Bones, pero basta por ahora, ahí os dejo un montón de fotos para recordar. Continuará… Y entonces
ya serán cuatro.